Si la caldera no enciende, puede deberse a distintas averías. A continuación te explicamos todo lo que necesitas saber sobre este tipo de problemas en las calderas.
Caldera no enciende: averías más frecuentes
- Falta de gas: si el problema es la falta de gas, la caldera hace chispa, pero el quemador no se enciende. En este caso tienes que comprobar que todas las llaves del gas estén abiertas y el contador funcione bien.
- Presión del agua: lo normal es que la presión del agua oscile entre 1,2 y 1,5 bares cuando los radiadores están fríos. Una vez pones en marcha la calefacción, suele ascender hasta alcanzar los 2 bares. Si la presión es demasiado baja, lo más probable es que haya alguna fuga. En caso de que sea demasiado alta, el problema puede estar en la instalación o en la válvula de seguridad.
- Salida de humos obstruida: si la caldera no enciende, otra causa probable es la obstrucción en la salida de humos. La caldera desprende monóxido de carbono, el cual no se evacúa de forma adecuada por el conducto de salida, de modo que la caldera se bloquea por motivos de seguridad.
Caldera no enciende: pasos a seguir
Si has puesto la caldera en marcha y no arranca, hay una serie de pasos previos que debes seguir antes de llamar al servicio técnico oficial.
- Lo más importante es asegurarte que la caldera está conectada a la corriente eléctrica.
- Comprobar si el aparato recibe adecuadamente el suministro de gas. Para ello tienes que comprobar una a una las válvulas de paso, verificando que todas están abiertas.
- Comprueba si la caldera parpadea. De ser así, lo más probable es que la razón por la que la caldera no enciende es un fallo del sistema.
Ahora que conoces por qué la caldera no enciende y qué debes hacer, si tienes cualquier tipo de problema con tu caldera, ponte en contacto con el servicio técnico de Mallorca Rapid.
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